La sesión, que se llevó a cabo en español, congregó a una audiencia interesada en comprender el equilibrio complejo entre las grandes potencias del Sureste Asiático, su crecimiento económico y los desafíos estratégicos a los que se enfrentan.
Emilio de Miguel comenzó su intervención destacando que centraría su análisis en la ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático), una organización intergubernamental formada por diez países, incluyendo a los cinco fundadores: Tailandia, Indonesia, Malasia, Singapur y Filipinas. La ASEAN nació con la intención de agrupar a estas potencias medias pro-occidentales en el contexto de la Guerra de Vietnam, con el objetivo de atraer y mantener el interés de Estados Unidos en la región, evitar la expansión del comunismo y promover un entorno de desarrollo económico y paz.
El fin de la Guerra de Vietnam significó una disminución del interés de Estados Unidos en la región, lo que llevó a los estados miembros de la ASEAN a firmar, en febrero de 1976, el Tratado de Amistad y Cooperación (TAC). Este Tratado busca promover la paz, estabilidad y cooperación en la región, fomentando la resolución pacífica de conflictos, el mantenimiento de la paz y la prevención de futuros conflictos. Actualmente, la firma del TAC es un requisito sine qua non para los países que desean integrarse en la Cumbre de Asia Oriental.
Durante los años 80, el conflicto camboyano tuvo un gran impacto regional. En 1978, el régimen de los jemeres rojos en Camboya fue derrocado por Vietnam. Dicha injerencia se interpretó como una violación del Derecho Internacional y generó temor en los estados de ASEAN ante la posibilidad de que la intervención militar vietnamita se extendiera a otros países vecinos. En ese contexto, ASEAN actuó como mediador entre las grandes potencias, como China, Estados Unidos y la entonces aliada de Vietnam, la Unión Soviética.
A finales de los 90, la ASEAN amplió su membresía con la incorporación de Laos, Camboya, Myanmar y Vietnam. Como señala Emilio de Miguel, “lo que ganaron en extensión, lo perdieron en cohesión”. Estos problemas de cohesión no fueron inmediatos, pero surgieron debido a las grandes disparidades económicas entre los países miembros, con una diferencia de 326 veces entre el menos desarrollado, Laos, y el más rico, Singapur.
Tras el Foro Shangri-La de 2010, se evidenció el aumento de las discrepancias entre Estados Unidos y China. Como resultado, ASEAN dio dos pasos clave: profundizar en su integración y desarrollar su arquitectura regional. Entre las medidas adoptadas se incluyeron la implementación de la Carta de ASEAN en 2007 y la creación, en 2009, de la Hoja de Ruta para la Comunidad ASEAN, entre sus objetivos estaba mejorar la percepción de ASEAN entre las sociedades civiles regionales.
En mayo de 2025, se celebrará en Kuala Lumpur la Cumbre ASEAN, que presentará la denominada Visión 2045, que establecerá los objetivos para los próximos veinte años. Según Emilio de Miguel, algunos de los aspectos que podrían abordar esta visión incluyen: el refuerzo de la Secretaría General, la creación de mecanismos para la gestión de conflictos y controversias, la redefinición del principio de no injerencia, la promoción de la participación de la sociedad civil y una mayor cohesión en su actuación en foros internacionales.
Emilio de Miguel también destacó algunos mecanismos dentro de la arquitectura regional, como la Cumbre de Asia Oriental, creada por ASEAN en 2005, que se ha convertido en el principal foro de diálogo político y de seguridad en Asia-Pacífico. En 2010, ASEAN creó la reunión ampliada de ministros de Defensa para fomentar la cooperación entre las fuerzas armadas, y el Foro Marítimo de ASEAN, centrado en la cooperación en el ámbito marítimo.
El ponente subrayó dos ejemplos paradigmáticos del funcionamiento de la arquitectura regional de ASEAN frente a crisis internacionales: el caso de Myanmar y el Mar de la China Meridional. En ambos, la falta de cohesión interna ha sido uno de los principales desafíos.
Para finalizar su intervención, Emilio de Miguel destacó algunos de los rasgos distintivos de la política exterior de los países de ASEAN, como la necesidad de navegar entre la rivalidad de China y Estados Unidos sin verse forzados a elegir. En este sentido, señaló que ASEAN es la asociación más cercana a la Unión Europea y está atravesando un momento geopolítico similar al de Europa.
Aranzazu Álvarez