La OTAN en su 75 aniversario: prioridades y desafíos

El 12 de abril de 2024, INCIPE celebró el evento virtual titulado La OTAN en su 75 aniversario: prioridades y desafíos, con la participación de Carmen Romero, vicesecretaria general adjunta de diplomacia pública de la OTAN. Esta sesión fue presentada por el embajador de España y miembro del patronato de INCIPE, Manuel Alabart. Tras la intervención del ponente, se inició una ronda de preguntas moderada por Vicente Garrido, director general del INCIPE. Para clausurar, el recientemente nombrado nuevo secretario general de INCIPE, el embajador de España Ricardo Díez-Hochleitner, ofreció una palabras.

Carmen Romero comenzó su intervención destacando el papel crucial de la OTAN en sus 75 años de historia. Según señaló, uno de los momentos más destacados de las conmemoraciones será en julio, cuando los jefes de Gobierno y Estado se reúnan en Washington. Este aniversario nos brinda una oportunidad para reconocer el papel de la Alianza, especialmente en la actual coyuntura de seguridad tan compleja. Nos enfrentamos a amenazas que ponen en riesgo no solo nuestra seguridad, sino también nuestro estilo de vida, incluyendo una guerra en territorio europeo. Además, estamos lidiando con una mayor competencia estratégica a nivel global y persisten muchos desafíos, como las amenazas híbridas, cibernéticas, el terrorismo y las implicaciones del cambio climático para nuestra seguridad.

«Necesitamos a la OTAN más que nunca», afirmó el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg. En la misma línea, destacó que «la buena noticia es que contamos con una OTAN fuerte». La Alianza ahora cuenta con más aliados que nunca, pasando de los doce miembros originales a treinta y dos países miembros en la actualidad, tras las recientes incorporaciones de Finlandia y Suecia. Además, cuenta con fuerzas militares con una preparación sin precedentes, mayores inversiones en defensa y una red global de socios más amplia que nunca.

La OTAN es principalmente una organización político-militar que protege a más de 1.000 millones de personas en el espacio euro-atlántico. Carmen Romero destacó que el 90% de los ciudadanos que viven en la Unión Europea residen en un país miembro de la OTAN. La Alianza se apoya tanto en instrumentos políticos como militares para garantizar nuestra seguridad. Romero resaltó que la OTAN es el único foro donde los países de América del Norte y Europa se reúnen diariamente para discutir cuestiones de seguridad relevantes. Todas las decisiones se toman por consenso, dejando de lado los intereses individuales en aras de la seguridad compartida. El instrumento militar ayuda a implementar las decisiones políticas a través de la defensa y la disuasión, con el objetivo de evitar conflictos en lugar de provocarlos. La Alianza es una organización de caracter defensivo, no ofensivo, preparada para defenderse si fuera necesario, pero siempre evitando escaladas y basándose en los principios de la Carta de las Naciones Unidas.

Carmen Romero se preguntó: ¿por qué la OTAN sigue tan relevante 75 años después de su creación? Sencillamente porque la OTAN ha sabido adaptarse. La Alianza nació con la misión de disuadir a la Unión Soviética, desempeñando un papel crucial durante 40 años para poner fin a la Guerra Fría y proteger a nuestros ciudadanos y territorios. Después de ese largo periodo, la OTAN amplió su enfoque más allá de la seguridad colectiva, participando en operaciones fuera de sus fronteras y contribuyendo a resolver conflictos en los Balcanes Occidentales. Tras los ataques terroristas del 2001, la OTAN asumió un papel principal en la lucha contra el terrorismo, rol que sigue desempeñando en la actualidad.

Después del fin de la Guerra Fría, Rusia pasó de ser un adversario a ser un socio y se estableció una cooperación práctica fundamental dentro de la arquitectura de seguridad. Sin embargo, la anexión de Crimea en 2014 y la ocupación de territorios en el Dombás por parte de Rusia cambiaron el espectro de seguridad para la OTAN. Después de 30 años de prosperidad y predictibilidad, se ha reactivado la seguridad colectiva como no se había hecho desde el fin de la Guerra Fría. Además, la amenaza terrorista ha aumentado con la aparición de grupos como el Daesh en Oriente Medio.

En respuesta a la agresión a Ucrania, la OTAN ha mostrado una unidad constante. Su respuesta se basa en tres pilares: apoyar el derecho de Ucrania a defenderse, reforzar la defensa y la disuasión para evitar que el conflicto se extienda a las fronteras de los países miembros de la OTAN, y trabajar con los socios de la Alianza como parte de una coalición internacional en defensa del derecho internacional.

Tras la intervención de Carmen Romero, se abrió un debate donde los participantes plantearon preguntas sobre los procesos de ampliación de la OTAN, las relaciones entre la OTAN y la Unión Europea y los compromisos de los países miembros en el gasto en defensa, entre otros temas.

Aranzazu Álvarez