El pasado 20 de septiembre INCIPE organizó un Desayuno de Trabajo bajo el título Un Visegrado dinámico para Europa, cuya presentación corrió a cargo de Jaroslav Blaško, Excmo. Embajador de la República Eslovaca en España.
El Grupo Visegrado, comúnmente conocido como V4, es una alianza político-cultural de los cuatro países centroeuropeos: Polonia, República Checa, Eslovaquia y Hungría. Sus orígenes se remontan al año 1335, momento en el cual los Reyes de dichos países, Carlos I de Hungría, Casimiro III de Polonia y Juan I de Bohemia (actual República Checa) establecieron en Visegrado – ciudad húngara de la que toman el nombre – un pacto de colaboración para la conservación de los intereses culturales comunes. Sin embargo, el grupo V4, tal y como lo conocemos hoy en día, se creó en 1991 tras una cumbre de los Jefes de Estado de estos países con el objetivo de impulsar y visibilizar un proyecto común en la integración europea bajo unos valores compartidos.
El encuentro se desarrolló en el marco de la nueva presidencia rotatoria del mismo, la cual se convierte en la quinta que Eslovaquia llevará a cabo. El programa, siguiendo en la misma línea que las presidencias anteriores, insiste en la importancia de la cooperación regional, así como en fortalecer las relaciones de vecindad con los países fronterizos, especialmente aquellos en los Balcanes. La unidad y las soluciones en aquellas áreas en las que exista consenso, y, sobre todo, que supongan de manera eficaz un impacto inmediato en la población, se mantendrán a través de un debate abierto y democrático que respete todos los intereses nacionales.
Las prioridades de la Presidencia eslovaca en el V4 se centran en una Europa fuerte, que fortalezca una perspectiva común de la Unión Europea y ayude a su unidad, con un entorno seguro, donde se impulse la Política Común de Seguridad y Defensa – especialmente en el marco de la PESCO y del espacio Schengen –, y donde se generen soluciones inteligentes dentro de la agenda digital, sin olvidar todas las demás responsabilidades con otros actores internacionales.
El Grupo Visegrado se ha convertido en un ejemplo de cooperación regional que ha supuesto un desarrollo estable de la zona y ha convertido el proceso de integración europea en un mecanismo de defensa de los intereses europeos. Es aquí donde el V4 asume su compromiso y desea salvaguardar su calidad de actor relevante en la esfera comunitaria, reforzando su posición dentro de la misma y desarrollando una política comprometida con los objetivos de la Unión Europea.
Andrei Rosca
INCIPE
