La Mesa Redonda estuvo moderada por el Embajador D. Nicolás Pascual de la Parte, ex-representante permanente de España ante el Consejo Atlántico de la OTAN. Se contó con las presencias de D. Fco. José Dacoba Cerviño, General Director del Instituto de Estudios Estratégicos y D. Santurnino Suanzes Fernández de Cañete, Subdirector de Planes y Relaciones Internacionales DIGENPOL y D. Lucas Manuel Muñoz Bronchales, G.D. Jefe de la División de Estrategia del Estado Mayor Conjunto. Por último, la clausura de la jornada estuvo presidida por D. José Luis Figuero, General Jefe de Gabinete del SEGENPOL.
Ante los nuevos escenarios que suponen complejos riesgos de seguridad y defensa, durante los últimos años la Unión Europa ha impulsado una serie de iniciativas a fin de desarrollar su autonomía estratégica y convertirse en un actor referencial en el panorama estratégico a nivel regional e internacional. Entre ellas, destaca la Cooperación Permanente Estructurada (PESCO) que tiene como objetivo intensificar y reforzar la cooperación en materia de seguridad y defensa entre los estados miembros de la Unión. Por otro lado y paralelamente, destaca la Iniciativa Europea de Compromiso Estratégico, iniciada por el presidente francés Emmanuel Macron, que comenzaba con la firma de una Carta de Intenciones (LOI) el 25 de junio de 2018 por nueve países europeos (Bélgica, Dinamarca, Estonia, Francia, Alemania, Países Bajos, Portugal, España y el Reino Unido). La Iniciativa Europea de Compromiso Estratégico es un proyecto intergubernamental de carácter operacional que, al igual que la PESCO, pese a encontrarse fuera del marco legal de esta y de la propia Unión Europa y la OTAN, tiene como objetivo primordial el desarrollo de la autonomía estratégica de Europa al mismo tiempo que persigue el fomento de una cultura estratégica europea.
La creación de esta iniciativa busca consolidarse como un instrumento para facilitar la formación de coaliciones de manera eficaz y mejorar el reparto de la carga en operaciones militares europeas, abarcando a los Estados europeos más capaces militarmente. Así pues, se pretende que ante situaciones de crisis, los distintos Estados miembros sean capaces de actuar conjuntamente con rapidez mediante planeamientos y protocolos previamente establecidos. Dentro del proyecto, los ámbitos de trabajo son principalmente cuatro, entre ellos, el desarrollo y planificación de escenarios de crisis, el apoyo de operaciones y el intercambio de inteligencia y previsión estratégica. Por otra parte, los ámbitos de actuación no sólo se ciñen al escenario puramente europeo sino que se pueden extender a otros territorios desde el Sahel hasta la frontera europea con Rusia, incluyendo tanto operaciones expedicionarias como de la defensa del territorio.
De esta manera, el Ministerio de Defensa español anunciaba en un comunicado que «Esta iniciativa, materializada a través de un foro de diálogo y cooperación, no pretende crear nuevas estructuras ni fuerzas conjuntas sino que discurre de manera paralela y compatible con otras iniciativas bilaterales o multilaterales y en refuerzo de las principales organizaciones internacionales de seguridad y defensa, como la ONU, la OTAN, la OSCE, y de forma destacada, con importante vocación europea».
Nereida Pérez
INCIPE